Pedimos varias cosas para probar, el sazón me encantó del taco de jícama creo que volvería por eso, el taco de costra de queso en segundo lugar (chorreaba exceso de grasa), el chicharrón de atún tenía un tipo empanizado un poco raro, la carne de hamburguesa y papas no me agradaron, ni la cochinita, podrían decir, que es por el precio de $22, pero yo creo que es para cuándo sólo quieres botanear mientras tomas, no alreves.
El servicio es muy bueno, tiene estacionamiento en la parte de atrás y aceptan pago con tarjeta, la música y el volumen es tipo bar, por lo que definitivamente no es un lugar para ir a platicar.